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Necesito escribir porque me estoy ahogando. Siento que a través de la escritura puedo gritar un rato. Quiero creer que de algún modo mis publicaciones aportan en algo para el resto o para mí.
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Estoy agotade del academicismo, su manera de funcionar me hace más daño que bien y es por eso que muchas veces no quiero tomarme el trabajo de citar personas y textos. De todas formas, no creo que el conocimiento le pertenezca a nadie, que tenga autor/a/e o dueño/a/e. Al final, el conocimiento siempre estará filtrado por la interpretación de cada quien. Y cuando dicho conocimiento queda desactualizado o sirve del todo para una nueva idea se la adapta a las nuevas necesidades. Es lo que podríamos denominar un cambio de paradigma. Siempre debemos leer con responsabilidad, sabiendo que no existen verdades que no puedan ser cuestionadas o caducadas. A veces tampoco es el objetivo clasificar la información como "científicamente verídica" sino ver los caminos y experiencias mentales que puede darse con la lectura o el intercambio de ideas que puedan surgir entre las personas que desde diferentes recorridos han leído lo mismo.
Desde ya, el registro del conocimiento en diversos dispositivos, es el constante intento de encapsular dicho conocimiento y apropiárselo, convertirlo en propiedad privada.
La acción de registrar el conocimiento siempre va a estar condicionado por la traducción del mismo a determinado medio. Me refiero, principalmente, a su registro a través de las palabras escritas. A pesar de existir múltiples maneras de generar un registro.
Se pusieron normas estrictas respecto a la "forma correcta" de redactar un escrito, dejando de lado que nada en dicha "morfología" es neutral. Más bien es medianamente "conveniente" para la producción masiva capitalista y deberíamos cuestionarnos que tanto queremos serles útil a un sistema que naturaliza una supuesta neutralidad sin analizar las posibles consecuencias de adaptarse a ella.
La autoría, más que como autoridad, podría servir para situar el contenido en un tipo de sujeto especifico en un contexto socio-histórico concreto. Pero podría caerse en la trampa de filtrar lo que leemos en base a los sesgos que tengamos de dicho sujeto o grupo de sujetos.
Pero ese es en parte el problema de darle a un sujeto la cualidad de ser dueño del conocimiento que nos brinda.
El conocimiento es "una red" inmensa compleja que funciona en múltiples niveles, direcciones, intersecciones, paralelismos, anacronismos, etc. Siendo múltiple y singular al mismo tiempo. Accesible e inaccesible. Una locura que comunica según cómo se lo vea. Y, para acabar con el egocentrismo humano, no se reduce a la especie humana.
Mi intención no es quitarle mérito a nadie. Quiero un conocimiento libre, diverso y lo más accesible posible para todes. Una accesibilidad que no sea solo pasiva sino activa.
Elena Nolusse.
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